El diputado y secretario general de Renovación Nacional, Diego Schalper, quedó con una “pequeña gota de optimismo”, tras la elección presidencial del domingo. “Si alguien hubiese dicho en mayo que a fin de año íbamos a estar con el Senado empatado, con la Cámara de Diputados equilibrada y con una segunda vuelta competitiva, yo le aseguro a usted que le habrían dicho que estaba loco, porque la verdad es que el desastre electoral que tuvimos en mayo hablaba de un país que se pegaba un giro hacía la izquierda”, argumenta.
El legislador alude a las elecciones de convencionales constituyentes realizadas el 15 y 16 de mayo, cuando la coalición de Vamos por Chile logró 1.173.198 votos (20,56%), quedando solo con 37 de los 155 escaños de la Convención. En contrapartida, el pasado domingo José Antonio Kast, apoyado por el Frente Social Cristiano y los partidos de Chile Vamos, consiguió 3.649.647 votos, es decir 44,1% del total de electores lo prefirió.
“Da la impresión que hoy día la centroderecha tiene una oportunidad de recomponer su entusiasmo y su ánimo”, señala Schalper en el programa radial la Mirada Líbero en Agricultura.
En la otra acera, Gabriel Boric se impuso con un 4,6 millones de sufragios. En una votación que logró una participación histórica ya que 8,3 millones de personas concurrieron a las urnas.
Con los números a la vista, Schalper insiste en que el 44% logrado por Kast representa un cambio en el escenario político, por lo que anticipa: “Si Boric y la Convención Constitucional no se dan cuenta de que se acabó el llamado ‘octubrismo’, es decir esta tendencia de tratar de refundarlo todo desde cero; si ellos insisten en eso el resultado puede ser muy negativo”.
El Presidente electo comenzó a participar en actividades con esta nueva investidura. Primero, en una reunión de trabajo en el Palacio de la Moneda junto al Presidente de la República, Sebastián Piñera, con miras al traspaso de mando del 11 de marzo de 2022 y luego, precisamente, con su visita a la Convención Constitucional, donde se reunió con la presidenta de la mesa Elisa Loncón, y el vicepresidente de la instancia, Jaime Bassa. “No espero una Convención partisana ni al servicio de nuestro gobierno porque no es lo que corresponde. La Convención va más allá de la coyuntura”, afirmó Boric al salir del encuentro.
En esa línea, Schalper destaca: “Los convencionales realmente tienen que tomarse en serio su trabajo. No pueden aspirar que la Constitución salga aprobada por pocos votos, sino que tiene que salir aprobada por al menos un 75%, eso es una Constitución que estaría diseñada para perdurar en el tiempo”.
“Si quieren armar una Constitución al estilo de Fernando Atria y de Jaime Bassa, entonces dígannos altiro para no seguir perdiendo tiempo y plata, porque por Dios que ha salido cara la gracia de la Convención Constitucional para que finalmente terminemos haciendo una constitución al modo de alguien y no al modo de lo que Chile necesita”, asevera el diputado.
¿El Boric de primera o de segunda vuelta?
Para ganar la elección, Gabriel Boric tuvo que moderar su discurso y su programa. La estrategia rindió frutos, pues esa diferencia entre una y otra elección, entre uno y otro Boric, se reflejó en los votos. En la elección del 21 de noviembre, Boric llegó segundo con 1.814.809 votos -146.313 menos que José Antonio Kast-, mientras que en la del pasado domingo ganó la carrera a La Moneda con 4.620.671 votos: 2.805.862 más que los que él mismo sacó en la primera votación y 971.024 más que su contrincante en el balotaje.
En este sentido, analiza Schalper, para determinar quién será la principal figura que desde la derecha pueda hacerle contrapeso al Presidente, hay que considerar “si el gobierno de Boric es un gobierno al modo de Boric de segunda vuelta. Es decir alguien que habla de acuerdo, de conversación, de diálogo, ahí evidentemente es uno el escenario”.
Y agrega: “Otro es el escenario si es que predominan, por ejemplo, personas que sacaron la voz que no la habían sacado. Vimos que volvió a hablar el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, recordándonos que el Partido Comunista es el partido central de la actual coalición de gobierno; el senador Daniel Núñez, que nos volvió a recordar que acá no había vuelta atrás en negociación con nuestro sector, sino que en definitiva iba a esperar algo así como la lógica de la Convención que es avanzar sin transar”.
“Yo tengo la impresión de que la oposición se va a estructurar en el Parlamento. Los que están en el Parlamento van a tener efectivamente más capacidad práctica de poder influir en el devenir del gobierno de Gabriel Boric”.
No obstante, el diputado señala que en este momento es difícil determinar cuál será la versión de Boric que se impondrá, pues se han enviado todo tipo de señales. “Cuando hace un llamado al diálogo, o hace un reconocimiento de los últimos 30 años, sin el discurso típico del Frente Amplio, ese es el Boric de segunda vuelta; pero cuando insiste en hacer propias las causas y los maximalismos que les han planteado desde ciertos sectores uno dice ‘chuta no’, este es el Boric de primera vuelta. Creo que es noticia en desarrollo porque al final mas allá de lo que pueda decir, hay ciertas decisiones políticas que son claves”.
Ejemplifica que algunas de estas decisiones son cómo se va a estructurar el nuevo gobierno, quiénes serán los ministros -en especial de Interior y de Hacienda-, cuáles serán los primeros proyectos que se establezcan como prioridad, como por ejemplo qué va a suceder con los denominados “presos de la revuelta”, con los retiros de fondos previsionales o cuál será la política de Estado en La Araucanía.
Con respecto a uno de estos puntos, están los dichos de su coordinador político, Giorgio Jackson, y de la integrante de su comando, la diputada Camila Vallejo, quienes indicaron que una de las primeras acciones del nuevo gobierno será el retiro de las querellas por Ley de Seguridad del Estado en hechos ocurridos en el contexto del estallido de octubre de 2019.
Sobre eso, Schalper señala: “Cualquiera que haya pasado por el centro de la capital se da cuenta de que lo que vivió Chile es una violencia extrema, y aquellos que la provocan obviamente son responsables y tienen que responder ante la justicia. Otra cosa distinta es creer que la violencia tiene asidero en ciertas coyunturas y yo creo que eso no es así”.
Para el diputado, la declaración de Jackson y los posteriores dichos de Boric quien llamó a “no anticiparse” y a revisar “caso a caso” permiten ver nítidamente “las varias almas que va a tener el gobierno de Boric, primero su coordinador político diciendo que se van a retirar las querellas por Ley de Seguridad del Estado y a continuación él mismo diciendo ‘no mire, vamos a ver caso a caso’. Me imagino que no va a ser fácil gobernar cuando permanentemente se vean enfrentadas tantas sensibilidades y tantas almas”, señala.
El parlamentario insiste en que es muy distinto un escenario donde el Ministro de Hacienda sea alguien vinculado a la izquierda más dura, o alguien más del mundo de la socialdemocracia. “Son dos planetas, son dos señales distintas”, sin embargo, subraya que hay que esperar las acciones concretas que el presidente electo pueda ir entregando. “No tengo prejuicio negativo respecto de lo que pueda hacer, pero obviamente estoy expectante para dónde va a mover el carro”, asevera respecto a una posible hegemonía del Partido Comunista en el gobierno de Gabriel Boric.
El rol de la centroderecha
En la elección del domingo, José Antonio Kast con sus 3,6 millones de votos a favor se acercó a la cantidad de sufragios que obtuvo en 2017 el Presidente de la República, Sebastián Piñera (3.796.579), por tanto el republicano sí logró captar a los votantes de derecha y de centroderecha, y su derrota estuvo influenciada por los nuevos votantes que se sumaron a la segunda vuelta.
Schalper dice que Boric capitalizó con los votantes más jóvenes y concede el trabajo territorial que ha llevado a cabo el Frente Amplio: “El FA, ya por varios años, lleva desarrollando una estrategia territorial que tiene que ver con mantener presencia política permanente, una de las cosas que tiene que hacer nuestro sector político, y aunque sea un poquito ingrato decirlo a estas alturas, es pasar de un pacto electoral que se activa políticamente en las vísperas de las elecciones, a ser una coalición política que hace trabajo permanente en los territorios”.
El diputado argumenta, además, que la ciudadanía ya no solo se estructura sobre sus relaciones territoriales, sino que también sobre causas específicas en temas que son de su interés. Y hace una autocrítica sobre el comportamiento de los partidos: “Hay que abrir espacios para las causas, para los estamentos, para los grupos sociales. Ahora, por fin, vamos a tener la posibilidad de desde RN actualizar las estructuras para estar a la altura de esa nueva ciudadanía que es distinta a la que se venía manifestando hace un tiempo atrás”.
Señala que es necesario tener una política permanente de trabajo con las comunidades y más presencia en las uniones comunales y juntas de vecino. Así como en las organizaciones sociales, federaciones de estudiantes, liceos, sindicatos. “En eso nuestros sector político pierde”.
En tanto, sobre la figura del excandidato presidencial, José Antonio Kast, en la centro derecha, el diputado manifiesta que “cuando me preguntan sobre la coalición o por un liderazgo en particular, yo me rebelo porque la discusión no está puesta ahí. Aquí no va a resolver el problema una individualidad, ese es el eterno error de nuestra coalición”.
Para el diputado, “lo central está en cómo le ofrecemos al país una centro derecha con identidad clara, y en eso no me tiembla la mano, pero al mismo tiempo una centro derecha que es capaz de empatizar y entender que aquí hay que gastar más energía en los próximos 40 años y no tanta energía en defender los últimos 40 años”.